El otro día me encontré con mi profesora con la que había hecho un examen esa misma mañana y necesitaba tener buena nota, así que para asegurarme de tenerla la acompañé a su casa y como la vi bastante receptiva, me lancé y me la follé. Gritaba y gemía tanto que me puse muy caliente y acabé corriéndome en su boca. Si no es por el sexo, será por el chantaje que le haré, pero sin duda sacaré un diez en el examen.