Dos compañeros estaban juntos en el office, manteniendo una discusión sobre el trabajo. La negra y el hombre se fueron poniendo cada vez más calientes, y sin mediar palabra se lanzaron a comerse la boca con rabia y pasión, se desnudaron, y echaron el polvazo más salvaje de sus vidas, con el que zanjaron aquella discusión y se quedaron tan a gusto.