El joven Juan El Caballo Loco, cada vez más famoso dentro del mundo del porno, tiene una nueva madrastra, una madurita rubia tetona que le da bastante miedo. La mujer, al enterarse de su profesión, no pudo evitar querer probar ella misma como es follar con él, la ponía muy cachonda la idea de un chico tan joven con una polla enorme, y no paró de acosarlo hasta tenerlo donde quería, a solas en una habitación y con los pantalones bajados. Primero le hizo una mamada casi a la fuerza, hasta que el joven pasó de remordimientos y se la folló con fuerza, dándole justo lo que quería, un buen polvazo.