Aunque acababa de llegar a su puesto de trabajo, esta colombiana pelirroja tuvo que cambiar sus planes cuando conoció a este chico. El hombre le quería ofrecer un pequeño negocio, con la excusa de usarla como modelo erótica. Pero al final, de lo que se trataba era de grabar porno y le ofreció tanto dinero que la chica no tuvo más remedio que aceptar. La colombiana acabó gozando mucho más de lo que esperaba, ya que se llevó una follada que seguramente llevaba tiempo necesitando.