Para la milf checa Anikka Albrite este momento fue único y seguramente lo recordará para siempre por lo especial que fue. El caso es que le ofrecieron rodar una escena con el negro Mandingo, el actor porno con la polla más grande del mundo y ella, lejos de achantarse y negarse, se ilusionó de tal manera que al día siguiente ya estaba siendo penetrada vaginalmente por la polla más famosa y grande del mundo del porno.