Apolonia Lapiedra empieza sus días con una rutina que es la envidia de muchos. Ella, al despertarse, disfruta del sexo con su pareja. Cada mañana, no dejan de hacerlo nunca, y es que comenzar la jornada relajada es muy importante para ella. Normalmente su chico está ya en el baño cuando Apolonia se despierta, y ella va a buscarlo como gata en celo. Se desnuda, le come la polla para ponerlo a tono, y en la cama, goza con las penetraciones profundas de su chico hasta que los dos comparten un orgasmo.