Ava Addams parece que nunca tiene sexo suficiente, ella nunca se sacia, y tras un día lleno de grabaciones llega a su casa para masturbarse, ni más ni menos que con la aspiradora. Su hijastro la pilló en plena faena y a la mujer no solo no le importó, si no que puso su sonrisa perversa y se lanzó a por su polla, para comérsela y después recibir sus penetraciones.