Britt James quería pasar la tardeen la piscina pero sin saberlo, lo que hizo fue provocar a su vecino al ponerse aceite bronceador en sus tetas grandes. El hombre negro con pollazo se acercó a ella con cara de tener mucha hambre, hambre de ella y le metió la polla en la boca sin cortarse un pelo. Luego la joven, ya muy cachonda y húmeda ante el inesperado encuentro, se puso a cuatro patas para recibir duras penetraciones que le provocaron un intenso orgasmo.