A pesar de que lleva ya un tiempo viviendo en occidente, esta chica árabe sigue teniendo la costumbre de ser sumisa con los hombres, pero si encima ese hombre es su nuevo amante, el cual tiene un enorme pollón entre las piernas, aún más sumisa es. A pesar de su cara poco alegre, para esta guapa árabe fue un auténtico lujo poder llevarse a la boca semejante polla y disfrutarla dentro de su coño en una follada rápida en la cocina de casa que está esperando repetir cuanto antes.