Dos jovencitas rubias estaban pasando el fin de semana en la ciudad y estaban dispuestas a dejarse llevar y vivirlo todo. Primero se fueron de compras, a la piscina y por la noche a cenar. Conocieron a un hombre que las puso muy cachondas y se fueron con él a la cama, nunca antes habían reaccionado así, y aprendieron a hacer un trío intenso que las llevó al mejor orgasmo de sus vidas.