Normalmente cuando se va a casa de un vecino es para pedirle un poco de sal, quizás aceite o simplemente para charlar de cualquier problema comunitario, pero en cambio, cuando Destiny Dixon acude a casa de su vecino lo hace para pedirle sexo. Ella es una mujer muy potente y muy activa en el sexo y como su marido se pasa más tiempo trabajando que pensando en ella, a la mujer no le queda otra que buscar sexo fuera de casa y parece que con su vecino ha encontrado al hombre perfecto para tener orgasmo muy placenteros.