Gia Milana tuvo que ir a la casa de su jefe a llevarle unos papeles y aunque no estaba, la recibió el novio gay, que por lo visto no es tan gay, porque se la folló como nunca habían hecho antes. Primero ella se puso de rodillas en el suelo mientras él se sentaba en el sofá y le hizo una mamada perfecta, acorde lo cachonda que estaba y luego él la penetró en diferentes posturas hasta vaciarse por completo.