Esta joven morena trabaja como puta en un conocido bar muy frecuentado por hombres guapos y fogosos que en la parte de arriba tiene habitaciones con cámaras ocultas instaladas. Gracias a eso podemos verla follando duro con uno de esos clientes tras una fiesta que celebraba una empresa. Ya en la cama y con lencería sexy, los dos se dejaron llevar por el alcohol y las ganas de sexo y follaron como animales.