Después de una mañana de compras con sus amigas, esta milf latina llegó a casa pensando en dedicarle algo de atención a su hombre. Nada más llegar y verle echándose la siesta, sintió la necesidad de darle placer, así que se quitó el vestido y empezó a chupársela. Cuando el chico despertó y vio lo que estaba pasando, le siguió la corriente y se llevó a la boca su coño, para luego follársela bien rico hasta acabar corriéndose en su cara.