Su marido ya está más pendiente de su trabajo y de sus cosas, que de ella, y claro, la mujer tiene unas necesidades sexuales que necesita saciar de alguna manera. Así que en una tutoría en la que se quedó a solas con su alumno más guapo, acabó lanzándose a por su polla y teniendo con él una follada increíble sobre su mesa. Una cogida increíble que sirvió para que el joven cogiera experiencia y para que ella pudiera remediar las ganas de polla de una vez por todas.