Riley Reid necesita dinero urgente y para conseguirlo no duda en meterse en la casa de su vecino a robar, pensando que se había ido a trabajar, pero el hombre estaba aún en la cama. Cuando lo despertaron algunos ruidos se extrañó, y al verla allí se vio obligado a castigarla por lo que pretendía hacer. Su castigo, aprovechando que estaba aún empalmado tras despertarse, fue follársela muy duro, primero metiéndole la enorme polla a la fuerza en la boca, y después por el coño en diferentes posturas, pero siempre llevando el control y la dureza de las penetraciones.